Redactado el 23 de Mayo de 2011
Establecer un espacio, un escenario, crear un clima para la creación y la innovación.
Para muchos empresarios les resulta lejano o extraño, pura teoría, solo posible en grandes corporaciones.
Para mi representa una de las experiencias más gratificantes que como empresario he tenido la oportunidad de vivir.
La base de mi empresa era la creación de trabajos de arte aplicados al calzado de señora principalmente.
Nuestro mayor valor (a diferencia de la competencia y su estrategia de copiar trabajos de éxito), era ser avanzadilla y ofrecer continuamente novedades, que llamaran la atención, que provocaran deseo, que enamoraran. Todavía su visión me provoca una sonrisa de satisfacción, todavía mi cabeza y mis manos son capaces de transformar un trozo de piel en un elemento mágico, vivo.
Hoy quiero transferir la experiencia creativa al mundo de la empresa, poder detectar cuáles eran las claves para conseguir unos resultados excepcionales.
INVESTIGACIÓN. Hambre continúa para conocer materiales y componentes. Siempre buscando, observando.
CURIOSIDAD. Cada material (especialmente trabajaba con pieles), era una oportunidad de transformación. Sentir con respeto cual era el origen, ver el animal cuando eran pieles, revivir los procesos de transformación que ya acumulaba cada componente, por qué manos había pasado, empaparme de toda su energía, y probar, probar, probar,…
ENSAYO y ERROR. …aplicar calor, humedad, arrugarlo, estirarlo,… con cariño y descaro, permitía descubrir posibilidades de cambio nuevas, que permitían crear nuevas formas y efectos.
EXPLORAR. Formaba parte de un Comité de Moda, de una Mesa de Tendencias, donde manejábamos información relevante sobre futuras tendencias, no dejaban de ser especulaciones, pero, lo más fascinante es que estábamos queriendo entender las motivaciones de compra futuras…
DIFERENTES PERSPECTIVAS. …cada miembro opinaba, a veces casi de forma vehemente, sobre el matiz exacto de cada color, de cada tendencia, sobre algo que debía consumirse dentro de 3 años. Surrealista para algunos, para mí un esfuerzo titánico, mezcla de experiencia, intuición, empatía social.
PREGUNTAR para APRENDER. La visita al cliente era casi para sacarle los nervios, preguntas, preguntas,… Exigía una ficha de requisitos a cumplimentar (formas, horma, bocetos, colores, materiales, limitaciones de coste, expectativas, tipología de la cliente objetivo, edad, emociones a transmitir,…). Algunos clientes me mandaban a paseo.
VISIÓN. Cada pregunta, con o sin respuesta, construía en mi cabeza imágenes de lo que podía conseguirse, el conocimiento y la experiencia, la investigación previa, me permitía tener rápidas respuestas internas.
COLABORACIÓN. Me gustaba compartir las ideas en equipo, y recoger diferentes perspectivas y posibilidades, para ayudar a definir claramente a la persona responsable que tenía que hacer concretamente. Disfrutaba de las objeciones, de cualquier apreciación.
CLIMA para CREAR. Cada uno tenía su fórmula, a mí me gustaba dedicar espacios para dibujar, con música, sobre el papel mis manos dejaban constancia de todo lo que “fluía” de forma espontánea. La inspiración, atropellada, dejaba ver nuevas y nuevas opciones.
ADAPTACIÓN & FLEXIBILIDAD & INICIATIVA. Bocetos, trozos de piel, materiales, cartas de colores, formas de troqueles de corte, patrones en papel,… Cada boceto se vestía con todos los elementos específicos, concretos a modo de ficha, para que a producción se facilitara un trabajo rápido y efectivo, se dejaba descrito cada detalle, incluyendo los milímetros de grosor para dividir la piel, patrón de corte,…
TRANSFORMACIÓN. Con todas las piezas ya preparadas empezaba la construcción de aquella visión, y allí estaba! Es increíble la sensación de hacer que LAS COSAS OCURRAN y ver el trabajo terminado. Y correr orgulloso a enseñar el resultado a los compañeros colaboradores.
EFICIENCIA. Entonces venia una parte esencial que era la de desarrollar todo un proceso sistematizado para que se pudiera repetir este en producción consiguiendo los mismos resultados de calidad. Y hacer todo un inventario de consumos, costes, limitaciones, tiempos, temperaturas, presiones,…
Y porque quiero contar esto!
Cada vez en las empresas tenemos más Tecnología disponible, la Innovación es el producto de cómo utilizamos esa Tecnología, la Innovación es una forma de trabajar. En mi caso era esencial para mi éxito y para conseguir ingresos poder transformar requisitos en ideas, e ideas en productos acabados, y entendía que necesitaba gestionar básicamente dos aspectos:
1. Identificar necesidades emergentes del mercado a través de las tendencias de moda.
2. Generar espacios creativos de Innovación, lo que Enrique de Mulder llama Microclimas de Innovación.
En muchos casos las empresas necesitáis crear productos genuinos para vuestros clientes, que os diferencien y os conviertan en referente. Las cosas no pasan ya porque sí, hay que identificar nuevos nichos y necesidades, ir al origen de las tendencias. Hay que buscar el talento y dejar que explote, que nazca y se desarrolle en climas de Innovación.
La creatividad, el pensamiento original, es la generación de nuevas ideas o asociaciones que producen soluciones originales.
El talento se puede buscar, pero, hay que valorarlo, darle los recursos, facilitarle el acceso a información relevante sobre tendencias y necesidades emergentes y crear el clima adecuado para que dé sus frutos.
El equipo creativo hay que entrenarlo para que sea eficaz y consiga el mejor rendimiento trabajando desde la colaboración con otros.
Puedes establecer ese espacio, ese escenario para la creación y la innovación.